3 oct 2024lLeída 161 vecesl2 minlCompartir Artículo
Del 1 al 7 de octubre y desde el año 2008 esta conmemoración recuerda la importancia de educar a los padres y madres, especialmente a los primerizos, sobre las muchas ventajas que conlleva criar a sus bebés cerca de su familia.
Del 1 al 7 de octubre y desde el año 2008 esta conmemoración recuerda la importancia de educar a los padres y madres, especialmente a los primerizos, sobre las muchas ventajas que conlleva criar a sus bebés cerca de su familia.
Este evento va mucho más allá del uso del portabebés, aunque sin duda es fundamental porque potencia el contacto físico frecuente y por tanto la conexión íntima entre los cuidadores y los bebés.
Existen numerosos estudios que corroboran las aportaciones del porteo al bienestar de niños y adultos: se ha comprobado que los bebés criados en brazos lloran menos que los que no lo son. Recordamos que la salud de los niños prematuros o con necesidades especiales suelen mejorar gracias al contacto físico con sus cuidadores, en parte porque supone una más rápida capacidad de respuesta las demandas de los bebés.
Sin olvidar que con el contacto físico aumenta la confianza entre las personas que participan en la crianza, afianza el conocimiento mutuo y se fortalecen las relaciones.
En esta semana tan especial sería conveniente reflexionar sobre cómo buscar momentos de interacción con nuestros bebés, tiempo para compartir salud y cariño a pesar de que hemos construido una sociedad cada vez más ocupada. Porque si su necesidad de contacto no está satisfecha es posible que arrastren de por vida la impresión de que no ser amado